Proponemos potenciar la refrescabilidad y aportar nuevos matices con
los siguientes rituales:
Un ritual clásico con un puntito ácido; nada puede fallar.
Un ritual canalla con chile rojo, solo apto para los más atrevidos.
Un ritual refrescante que potencia el sabor refrescante del producto.
La combinación perfecta de manzanas dulces y ácidas, convierte a nuestra cider en la acompañante ideal para los siguientes maridajes, entre otros:
Recomendamos el uso del ritual clásico de tres hielos y una rodaja de limón, para potenciar los matices dulces sin perder la esencia de Ladrón de Manzanas.
Para la perfecta combinación de cítrico y dulce.
Su toque dulce la hace perfecta para maridar tanto con postres como con todo tipo de comidas:
Servir fresquito: siempre con hielo y una rodaja de lima para realzar el sabor.
Simplemente espectacular:
refrescante, equilibrada y
con un twist cítrico que eleva
cada sorbo.